lunes, 7 de septiembre de 2009

De la revista Cero en Conducta

Estimado(a) Dubriel García Rodríguez:

Por considerarlo de su interés le enviamos algunas notas selectas sobre los nuevos libros de texto de educación primaria. Pronto subiremos a nuestra página una colección completa del debate en prensa y radio... la TV, prácticamente no ha mencionado el tema.

Reciba un cordial saludo.

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EL UNIVERSAL

Reponer libros de texto tiene costo de 166 mdp
Por la elaboración de cada uno se pagó 6 pesos, según cifras de la Conaliteg

Nurit Martínez
Martes 25 de agosto de 2009
nurit.martinez@eluniversal.com.mx

Los libros de primero y sexto grado de primaria, incluidos los de Historia en los que se elimina la enseñanza de la Conquista y los siglos de colonización española, tuvieron un costo de más de 166 millones 239 mil pesos, de acuerdo con información de la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos.

El precio promedio de elaboración de cada texto fue de 6 pesos, por lo que la reposición de los 27 millones 706 mil 600 libros del primer año de educación básica (4 textos) y del sexto grado (6 libros) significaría una erogación similar a su costo.

Mediante un correo electrónico difundido ayer entre investigadores y coordinadores de los Consejos Consultivos Interinstitucionales —convocados por la Secretaría de Educación Pública (SEP) para la elaboración de los libros de la Reforma Integral de la Educación Básica— se precisa que el pasado 13 de agosto en una reunión “convocada de urgencia” con el subsecretario de Educación Básica, Fernando González Sánchez, se acordó informar a padres de familia y maestros que estos libros “son provisionales y que se cambiarán el próximo ciclo escolar”.

El correo electrónico, del cual este diario tiene una copia, señala que tras el “tenso” encuentro con el funcionario se convino “sacar un comunicado en los periódicos de circulación nacional diciendo que los textos que se repartieron este año son provisionales”.

Ahí se determinó integrar un comité de dos representantes del Consejo General de los Consejos Consultivos Interinstitucionales y dos representantes de la subsecretaría que encabeza Fernando González —yerno de Elba Esther Gordillo Morales, presidenta del SNTE— para hacer el comunicado sobre las condiciones de los libros y que debió de difundirse antes del inicio del ciclo escolar.

En ese encuentro, los representantes de los Consejos de español, matemáticas, ciencias, artes, lenguas extranjeras, tecnología y formación cívica y ética, presentaron al subsecretario un documento en el que aseguran que “los libros de texto que se han repartido en las escuelas son deficientes y constituyen un daño severo a la educación básica”.

Establece que ubicaron “problemas estructurales, conceptuales y didácticos que cada Consejo ha hecho del conocimiento del subsecretario y su equipo de trabajo”.

Agrega que “la decisión de difundirlos en esas condiciones, deja a los consejos con la obligación académica y moral de que este problema sea conocido por la sociedad”.

En ese documento propusieron al subsecretario “la solución de este grave problema” con cinco puntos. El primero “pedirle a la subsecretaría que se reconozca oficialmente que los actuales libros no son adecuados y en consecuencia que deberán ser sustituidos para el siguiente ciclo escolar”.

El segundo es “invitarlos a formar un equipo de trabajo para la elaboración de los siguientes libros y de los que están en curso”.

El tercero es un compromiso de los Consejos para apoyar “con asesoría permanente para la selección de posibles autores o grupos de académicos que puedan hacerlo”.

Sugieren, en el cuarto apartado, que “los temas, unidades, etcétera, que se elaboren para los nuevos libros, deberán ser probados en pequeños grupos de estudiantes con procesos confiables que garanticen que están elaborados al nivel escolar correspondiente”

En el último punto, precisan que el trabajo de los Consejos “serán realizados sin ninguna retribución monetaria y que, en caso de que haya consejeros que quieran involucrarse en la elaboración de los textos u otros trabajos, deberán renunciar a su consejo respectivo”.

En ese documento, se pidió al subsecretario que informara a los mexicanos que los libros de primero y sexto grado —los primeros de ésta reforma— “serán reemplazados”.

A partir de “Actas de Fallo” para la asignación de la “maquila” en la Conaliteg a empresas como “Litografía Magnograf” se halló que el precio promedio para elaborar cada texto fue de 6 pesos en el caso de primaria.

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LA JORNADA

Miércoles 2 de septiembre de 2009

El correo Ilustrado

Sobre los libros de texto

Los nuevos libros de texto de ciencias naturales representan un grave retroceso educativo debido a su pésima calidad. Es necesario su inmediato retiro de las escuelas para evitar un daño a la niñez mexicana y al futuro desarrollo de la ciencia.

En la SEP se han elaborado materiales didácticos de alto nivel con equipos interdisciplinarios de científicos, investigadores en enseñanza de ciencias y buenos docentes, en tiempos y con recursos que sólo la SEP puede tener. Pero los compromisos políticos con la cúpula del SNTE han sustituido a los especialistas por miembros del sindicato subordinados a Elba Esther Gordillo. Así, los libros de ciencias naturales se elaboran con graves deficiencias en todos los aspectos. Tienen cantidad de errores y una concepción de la enseñanza de la ciencia como síntesis informativas que parecen obtenidas de Internet, como verdades con lenguaje técnico inaccesible y definiciones incomprensibles que no permiten entender los fenómenos porque tampoco se abordan sus causas. Los niños van a tener que memorizar información incorrecta, confusa, contradictoria y ya superada por la ciencia. Estos textos no son corregibles pues su problema no es sólo de errores. Su concepción ignora decenas de años de investigación y experiencia en desarrollo didáctico. Indigna que la SEP desperdicie gran cantidad de recursos en libros que son peores en todos los aspectos a los vigentes, y que pretenda imponerlos en las escuelas a pesar de todos los cuestionamientos.

Antonia Candela, Departamento de Investigaciones Educativas del Cinvestav. acandela@cinvestav.mx

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LA JORNADA, / 7 de septiembre de 2009

El volumen induce a “gran cantidad de errores conceptuales”, señalan especialistas

Confundirá a alumnos el libro de ciencias naturales de sexto, alertan

Consejo consultivo presentó en junio a autoridades educativas un dictamen al respecto

Los estudiantes tendrán “problemas severos” de comprensión durante toda su vida

La reforma educativa en primaria fue hecha “sobre las rodillas”, acusaron expertos. Alumnos durante el primer día de clases del ciclo escolar 2009-2010 Foto Roberto García Ortiz

Karina Avilés

Con un texto cuyos autores “no comprenden de manera amplia y suficiente los conceptos y las teorías que describen”, el nuevo libro de ciencias naturales para sexto grado llevará a los estudiantes a “problemas severos en la comprensión de la ciencia, no sólo en la primaria, sino para toda su vida escolar y futura”.

El texto induce a “gran cantidad de errores conceptuales”, con evidentes “retrocesos” en el desarrollo de los temas.

Lo anterior forma parte del dictamen elaborado por el Consejo Consultivo Interinstitucional de Ciencias (CCIC) –“a petición del subsecretario de Educación Básica”, Fernando González Sánchez–, en el cual se concluye que dicho título “no reúne los requisitos mínimos para que sea distribuido entre los niños del país”.

Por ello, el CCIC solicitó al funcionario –yerno de la maestra Elba Esther Gordillo–, que “no se utilice como libro de texto de sexto grado, sino que se busque una alternativa para solucionar este grave problema”.

Errores

Ese cuerpo de especialistas, cuya función es revisar los programas de estudio de la Secretaría de Educación Pública (SEP), entregó los resultados a la subsecretaría el pasado 10 de junio, pese a lo cual el libro tuvo un tiraje de casi 2 millones 500 mil ejemplares y se distribuyó a los alumnos.

El texto promueve que el alumno confunda “el funcionamiento del telescopio con el microscopio”, induce la idea de que “sólo los objetos que caen tienen que ver con la gravedad” o que “el manejo de las primeras formas de vida parecieran dar sustento a la generación espontánea”, apuntan los expertos.

Incluso, sugiere a los escolares que “de la mezcla de sustancias no vivas surge la vida”, y alienta a que los alumnos infieran que la misma “evolucionó por acumulación de organismos unicelulares”, además de inducir una “visión lamarquiana, donde el medio determina la transformación de la especie”.

El CCIC advierte que el libro no es un instrumento adecuado para “generar procesos de enseñanza-aprendizaje que promuevan el desarrollo de habilidades y actitudes científicas” y, por el contrario, favorece una “postura educativa centrada en la obediencia y la rigidez cognitiva”.

Así, señala que “el libro carece de un proceso didáctico definido” y cada lección se presenta con “incoherencia en el tratamiento de los temas”, por lo que es frecuente encontrar “retrocesos” y “contradicciones en las lecciones”.

El consejo también concluye que “no hay articulación entre las actividades experimentales y el desarrollo de los temas y no están orientadas a la construcción de las nociones científicas”. Además, las “analogías que se utilizan en muchas de las actividades experimentales son erróneas e inducen a su vez a errores conceptuales en los alumnos”.

Es el caso de una actividad en la que se pide al alumno que introduzca confeti en un globo, lo infle y lo pinche para simular la “gran explosión o Big Bang”.

Sin embargo, el “experimento planteado no es análogo a una explosión y su explicación tiene que ver con la expansión de un gas en función de la temperatura, y no con una explosión, como se describe en el texto”.

Advierte que hay un marcado énfasis en la realización de “actividades prácticas” con experimentos que en realidad “no lo son”.

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LA JORNADA, 7 de septiembre de 2009

Mezcla material nuevo con el usado antes, dice Fuentes Molinar

Con “argumento tramposo” enreda la SEP debate sobre textos de historia

Karina Avilés

La Secretaría de Educación Pública (SEP) ha pretendido confundir a la opinión pública con un “argumento tramposo”, al mezclar el debate de los nuevos libros de texto con volúmenes anteriores, con el propósito de evitar lo evidente: la reforma educativa en primaria fue hecha “sobre las rodillas, de manera atropellada, desordenada” y con “una cantidad de errores” de contenido que no hace más que ratificar la “incapacidad de quienes han conducido este proceso”, expresaron expertos en la materia.

A raíz del análisis realizado por el ex subsecretario de Educación Básica Olac Fuentes Molinar, en el que mostraron mutilaciones de etapas de la historia nacional, como la Conquista y la Colonia en el libro de historia para sexto año de la llamada Reforma Integral de la Educación Básica (RIEB), el titular de la SEP, Alonso Lujambio, rechazó que se eliminaran esas temáticas, al señalar que se incluyen en el libro de cuarto año, que no es parte de la reforma.

En entrevista, Fuentes Molinar puntualizó que en el nuevo libro de sexto –no el de cuarto año del plan de 1993, al que se refiere Lujambio–, es donde se suprimieron dichas etapas históricas.

Recordó que el libro que cuestionó –el de sexto año de la RIEB– fue elaborado con una parte de la temática que durante años fue estudiada en el texto de quinto año del plan anterior.

En relación con este último, en el nuevo libro de historia para sexto se suprimieron la lección 12, “La conquista de América”, de las páginas 147 a 157; la 13, “La colonización y la Nueva España”, de las páginas 159 a 173, y la 14, “América en el siglo XVIII”, de las páginas 175 a 183.

Pese a los hechos, la SEP negó la “existencia de alguna mutilación de temas históricos” y distribuyó en “medios de información y entre comentaristas” el libro de historia para cuarto grado vigente desde la década de los noventa, expresó el especialista.

Esa acción, agregó, “ha introducido gran confusión en el análisis de la reforma en marcha, mezclando libros no reformados con otros de nueva elaboración. Como mínima aportación a la discusión, la SEP debería entregar a los medios y las personas a quienes envió el libro de cuarto grado los correspondientes al texto reformado de sexto, y a su antecedente parcial de quinto, indicando el estatus que guarda cada uno en el proceso de reforma en marcha”.

Por separado, el profesor-investigador de la Universidad Pedagógica Nacional César Navarro consideró que la SEP ha ofrecido un argumento “leguleyo” para desplazar el debate hacia un libro que nunca se cuestionó.

Con ello, la dependencia pretende “confundir” a la comunidad educativa y “atacar” a los medios –donde los expertos y documentos han evidenciado “errores graves de contenido”– para presentarlos “como promotores de falsos argumentos, cuando quienes mienten son los funcionarios de la SEP”.

Lujambio, agregó, “vuelve a ser un rehén del poder y del control del SNTE”, porque el responsable de la RIEB y de la elaboración de sus textos es el yerno de Elba Esther Gordillo, Fernando González Sánchez.

Así, el titular de la dependencia ha “salido a defender lo indefendible”. Pero cuando los análisis han evidenciado errores que son “inaceptables” y se ha comprobado que la SEP violó la ley al distribuir los textos sin publicar los nuevos programas de estudio en el Diario Oficial de la Federación, la dependencia ha optado por el silencio, que en “boca de Lujambio es una forma de la impunidad de los atropellos”, afirmó.

1 comentario:

  1. Felicitaciones, muy interesante el articulo, espero que sigas actualizandolo!

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